Infecciones en quemados: revisión de la evidencia

Revisión de la evidencia: Dra. Jesica Asparch

Médica residente UTIA / HIBA

El diagnóstico de sepsis en los pacientes quemados es un desafío actual en las unidades de cuidados críticos, dado a que estos pacientes presentan criterios de SIRS debido a las lesiones, este evento dificulta la aplicación de los criterios clásicos para detectar infecciones.

Ante esta problemática, en el 2007 la Sociedad Americana de Quemados reunió a un grupo de expertos y escribieron un consenso con nuevos criterios para definir sepsis en quemados. Los cambios más relevantes son:
– La nueva definición de fiebre en quemados, que se define como más de 39ª C, dado a la nueva regulación del termostato
– Plaquetopenia, que se aplica recién a partir del tercer día, dado a que previamente la plaquetopenia puede estar causada por dilución secundaria a la reanimación con fluidos
– Intolerancia a la alimentación
Además los criterios clínicos deben estar acompañados por rescate de gérmen en cultivos o anatomía patológica y/o respuesta al tratamiento antibiótico.
El origen más frecuente de las infecciones es el sitio de la herida, predominando las infecciones bacterianas a bacilos Gram negativos. No debe pasar desapercibido el hecho de que en estos pacientes es común ver infecciones fúngicas. Se debe reconocer la diferencia entre colonización de la herida, que es la presencia de patógenos en bajo recuento sin signos de sepsis, de la infección local y la infección invasiva, las cuales muestran alto recuento de gérmenes sin y con signos de sepsis, respectivamente.
No existe evidencia sólida que respalde la toma de hemocultivos seriados o un tratamiento antibiótico en particular, sino que este debe ajustarse a la flora preponderante de cada nosocomio.
Dado a la alta mortalidad que presenta la sepsis en los pacientes quemados, hay múltiples estudios que intentan encontrar un marcador fidedigno de infección. Uno de los mas investigados es la procalcitonina, que es sensible, pero no específico, ya que se encuentra aumentados en situaciones proinflamatorias, entre ellas el trauma. Varios estudios intentaron demostrar la utilidad de este marcador, pero la diferencia en los resultados obtenidos en los protocolos radica principalmente en la definición de sepsis utilizada en el protocolo. En el 2012 se publica en la revista Burns el primer protocolo utilizando los criterios de sepsis propuestos por el Consenso Americano de Quemados, obteniendo resultados que apoyan el uso de la procalcitonina tanto como marcador preséptico, como par segumiento del tratamiento.
Otros marcadores son el ProBNP y la presepsina, actualmente en estudio, que mostraron resultados positivos como predictores de sepsis.
Dado a la complejidad de la respuesta inflamatoria frente a la sepsis, es improbable que un solo biomarcador sea suficiente para guiar la práctica clínica, para ello se requiere, como en todos los casos, una visión integral del paciente.
Link a la presentación: Infecciones en Quemados

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